China “es una de las mayores amenazas para Suecia”.
Esa afirmación —emanada de los servicios de inteligencia suecos— provocó que el regulador de telecomunicaciones de ese país escandinavo tomara una decisión: prohibió la operación de los equipos de telecomunicaciones de ZTE en su red 5G.
Con esta medida, oficializada el 20 de octubre, Suecia se suma a otras naciones europeas que han restringido a los proveedores chinos por motivos de seguridad, informó la agencia Reuters.
Los gobiernos europeos han endurecido los controles sobre las empresas chinas que desarrollan redes 5G, luego de la presión diplomática de Washington, que alega que Beijing podría usar equipos Huawei para espiar.
Por su parte, Huawei ha negado repetidamente ser un riesgo para la seguridad nacional.
En julio de 2020, Reino Unido anunció que los equipos de Huawei se eliminarían por completo de su red 5G para 2027, convirtiéndose en uno de los primeros países europeos en hacerlo.
Con respecto a la acusación sueca, China señaló que no se había proporcionado “evidencia concreta” para demostrar que los equipos de sus empresas representaban una amenaza para la seguridad nacional de Suecia.
“No hay motivos fácticos para respaldar las acusaciones de que Huawei representa una amenaza para la seguridad. La exclusión de Huawei se basa simplemente en una presunción infundada y es injusta e inaceptable”, destacó un portavoz de la empresa tecnológica china.
En cuanto a ZTE, ningún representante ha dado declaraciones todavía.
Suecia es la sede de Ericsson, uno de los principales proveedores de equipos de telecomunicaciones de Europa y el mayor rival de Huawei en ese continente.
China, descontento, pide revertir medida
En una posible señal de represalia, el regulador de telecomunicaciones de China emitió, también el martes 20, un aviso pidiendo una supervisión más estricta a las empresas de telecomunicaciones extranjeras que operan en el país.
Sin embargo, la respuesta oficial llegó el miércoles 21: el Ministerio de Relaciones Exteriores de China instó a Suecia a revertir la prohibición si quiere evitar un «impacto negativo» en sus propias empresas.
«China expresa un fuerte descontento con Suecia», dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Zhao Lijian.
«Suecia debe mantener una actitud objetiva y justa, y corregir su decisión incorrecta, para evitar un impacto negativo en la cooperación económica y comercial China-Suecia y las operaciones de las empresas suecas en China», añadió.
* Actualizada el 21 de octubre con reacción oficial de China
