Con los años, Land Rover se ha ido alejando de sus orígenes. Aunque cómodos modelos de lujo, y no elude para nada el tema de la electrificación. Por ello, de vez en cuando, Land Rover necesita recordarle a la gente que no es solo “otro” fabricante de autos.
Un Land Rover Range Rover Sport acaba de subir hasta La Puerta del Cielo, un arco de roca natural ubicado en la cima de la montaña Tianmen, en China. Land Rover afirma que el Range Rover Sport es el primer SUV que llega hasta allí. Esto no nos sorprende, considerando que no hay —precisamente— un camino hacia este punto de referencia. Lo único que conduce (a los humanos) hasta La Puerta del Cielo es una escalera con 999 escalones y una inclinación de 45 grados. Ni Sylvester Stallone en Rocky…
Solo para llegar hasta los escalones es necesario subir por un estrecho camino con 99 curvas bastante cerradas en la montaña. Conocido también como el «Camino del Dragón», se extiende por 11.3 kilómetros (7.0 millas). Al volante estaba el piloto de carreras Ho-Pin Tung, que tiene una victoria en las 24 Horas de Le Mans en su currículum, y actualmente es un piloto de reserva para el equipo de la Fórmula E de Jaguar. Sin embargo, no estamos seguros de cuán relevantes fueron esas experiencias para este desafío de manejo en particular.
El vehículo utilizado para esta proeza fue el nuevo modelo híbrido enchufable Range Rover Sport P400e, tal y cual lo puedes encontraren un concesionario, con la sola excepción de unos neumáticos opcionales todoterreno. El P400e combina un motor de cuatro cilindros de 2.0 litros turboalimentado y un motor eléctrico. Juntos, ofrecen una potencia combinada de 400 caballos de fuerza y 472 libras-pie de torque. En terreno llano, Land Rover afirma que el P400e pasa de 0 a 60 mph en 6.7 segundos.
Modelos como el P400e son el futuro de Land Rover. El fabricante de automóviles y su hermano Jaguar planean ofrecer un tren motriz híbrido o eléctrico en cada vehículo que vendan en 2020. Los estándares de emisiones más estrictos están provocando un efecto en cadena, con otros fabricantes haciendo también planes similares. Con acrobacias como esta, Land Rover espera demostrar que sus modelos electrificados ofrecerán el mismo rendimiento que sus predecesores. Porque, a pesar de que es probable que ningún cliente maneje nunca su Range Rover Sport por una escalera como esta, los compradores quieren saber que sí podrían hacerlo. Eventualmente, claro.
