Hace más de 50 años, el Ford Mustang irrumpió en la escena y cambió el juego para siempre. No fue el primer muscle car jamás construido, pero con el nació el término «pony car», que pasó a describir clásicos como el Chevrolet Camaro, el Pontiac Firebird y el Plymouth Barracuda. Si Ford dejara de fabricar el Mustang hoy, su lugar en la historia se consolidaría.
Afortunadamente, el icónico ‘Stang sigue siendo fuerte. Un modelo 2018 renovado llegará a las salas de exposición antes de fin de año, y aunque es técnicamente una actualización de mitad de ciclo —y no una generación completamente nueva— hay mucho a lo cual atender. Desde los caballos de fuerza a los faros, y desde estos hasta impresionantes estadísticas de rendimiento, sumado también al nuevo Performance Pack Level 2.
Ford presentó Mustang 2018 y Mustang Convertible 2018 online, luego de la filtración de un video promocional en YouTube. Hasta ahora, el diseño ha demostrado ser bastante polarizador.
La actualización trae la nueva chapa del pilar A hacia adelante. Los faros son más pequeños que los modelos actuales, y cada uno recibe tres tiras cortas de luces diurnas LED. Es una interpretación moderna de una de las claves de estilo definitorias del Mustang original, que inteligentemente proporciona al modelo 2018 una nueva forma de iluminación.
Un parachoques rediseñado y señales de giro horizontales completan las actualizaciones en el frente. En la parte posterior, el Mustang viene con una fascia trasera rediseñada y un escape de cuatro tubos estándar. Agrega tres nuevos acabados de pintura y 12 opciones de rueda, y ahí tienes la suma total de los ajustes exteriores.
El Mustang es una teléfono inteligente (Ford) para encender, bloquear, desbloquear y ubicar su automóvil.
Mustang tiene el primer grupo de instrumentos completamente digital de Ford. Esta unidad LCD ofrece tres temas separados, todos totalmente configurables, reflejando los modos de conducción normal, deportiva y de seguimiento. Los conductores también pueden guardar sus preferencias favoritas de suspensión y dirección, llevando a este muscle car de larga data al corazón del siglo XXI.
El motor V6 de 3.7 litros de aspiración natural ha sido eliminado de la línea del Mustang 2018. El motor de entrada pasa a ser ahora un cuatro cilindros de 2.3 litros EcoBoost. Los que quieran más poder pueden subir al modelo GT, propulsado por el motor Coyote V8 de 5.0 litros. El V8 bombea 460 caballos de fuerza y 420 libras-pie de torque. Realiza el sprint de referencia de cero a 60 mph en menos de cuatro segundos, lo que le da derecho a alardear como el Mustang GT más veloz. Lograr ese tiempo requiere el uso del modo Drag Strip, que optimiza la transmisión y la entrega del torque del motor.
Las opciones de transmisión incluyen una manual de seis velocidades y una nueva automática de 10, que reemplaza a la unidad de seis velocidades del vehículo actual. Ford asegura que la automática de 10 velocidades ofrece una mejor respuesta a baja velocidad. La programación de turnos adaptativos en tiempo real garantiza que la transmisión esté siempre en el cambio correcto, aunque las paletas montadas en el volante están disponibles para los conductores que desean ejercitar sus dedos.
El Mustang 2018 se puso a la venta en todo el país —oficialmente— el pasado 25 de julio, y las primeras entregas están ya a la vuelta de la esquina. Su precio comienza en $25,585 para un modelo base con el cuatro cilindros y $35,495 para la versión más barata con motor V8. El precio para los dos modelos convertibles comienza en $31,485 y $44,995, respectivamente.
