Uno de los grandes misterios de la humanidad tiene que ver con los gato que maúlla en tus piernas, o incluso el hámster que da vuelta en la rueda, es algo que solo la ficción con el Doctor Dolittle ha podido hacer.
Ha habido varios intentos de desarrollar sistemas que permitan a las mascotas comunicarse (un ejemplo notable es cuando los perros presionan botones de sonido programables, cada uno de los cuales representa una palabra o frase, para «hablar» y expresar necesidades, emociones u observaciones), pero ninguno es tan emocionante como el propuesto por el gigante tecnológico chino Baidu en una patente presentada ante la istración Nacional de Propiedad Intelectual de China.
La patente describe un sistema que recopila datos de animales como sonidos vocales, comportamiento y señales fisiológicas, informó Sky News esta semana. La información recopilada se procesaría y luego se fusionaría para el análisis de IA, creando una tecnología capaz de interpretar cualquier sonido que haga el animal.
Pero no esperes que empieces a tener conversaciones con Bobby sobre el clima, o que tu gato empiece a hacer comentarios críticos sobre tus elecciones de Netflix. Para empezar, no se menciona la creación de una IA que pueda responder a los animales, y la información principal que probablemente obtendrá es algo sobre el estado emocional de su mascota.
En la patente, Baidu dice que el sistema mejoraría «la precisión y la eficiencia de la comunicación entre especies», aunque un portavoz de la compañía advirtió que su tecnología está «todavía en la etapa de investigación».
Ya ha habido algunas investigaciones de alto perfil para tratar de encontrar formas de traducir con precisión los ruidos de los animales, particularmente los de los perros. Un estudio en curso realizado por el Laboratorio de Cognición Comparativa de la Universidad de California en San Diego, por ejemplo, ha estado analizando cómo se pueden usar las cajas de resonancia mencionadas anteriormente para ayudar a los perros a expresarse. Algunos perros incluso han demostrado que pueden combinar varias palabras para formar solicitudes simples como «juego al aire libre» o «comida ahora». Pero los críticos argumentan que puede haber demasiadas suposiciones sobre la capacidad de los perros para entender completamente las palabras, lo que sugiere que podrían estar presionando los botones porque han aprendido a hacerlo en respuesta a ciertas señales, como el sonido del botón.
Con la tecnología de IA avanzando tan rápidamente, esperemos que Baidu esté en lo cierto.